Es un hotel básico que nos dejó un sabor agridulce. Nos tocó la habitación número 5, en donde no había frigobar, plancha o secadora de pelo. La caja fuerte no funcionaba, había focos fundidos, el asiento del baño manchado y safado de su lugar, mientras que las sábanas y toallas estaban manchadas. Los colchones muy duros y las almohadas muy “básicas”, solo había dos por cama, además de no tener colchas abrigadoras. Por otro lado la cercanía a pie del pueblo, su playa y tener la piscina a escasos 3 metros de la habitación son sus puntos fuertes. ¿Me volvería a quedar? No lo sé, pero si espero mejoren los puntos negativos para considerar alguna vez hospedarme de nuevo.